Después de ver el cortometraje "malos hábitos" el equipo discutió sobre lo que pensábamos.
La historia va de dos personas teniendo relaciones sexuales, ambas sintiéndose un poco culpables por lo que hicieron. Al final nos damos cuenta que la mujer es una "monja" y el hombre es un "padre".
Viendo esto, el hecho de que dos personas que se aman se esconden por miedo a los prejuicios de la gente, es un poco triste. Platicamos sobre esto y todos concordamos que no se les debería prohibir a las monjas o padres el casarse, enamorarse o tener hijos.
Para algunas personas es una decisión tomada libremente, pero para otras no lo es.
Todo se remota al año en 1139, al final del II Concilio de Letrán, el matrimonio fue prohibido de forma oficial a los miembros de la iglesia. Las personas hacen un voto de castidad para solamente compenetrarse con Dios.
Pese a que la decisión estaba apoyada en los pasajes bíblicos – como “bien le está al hombre abstenerse de mujer” ( Corintios) –, una de las razones más poderosas para la transformación al celibato en toda regla fue que, ya desde entonces, este dictaba las reglas de la humanidad. ¿Fe? No lo creemos, algunos dicen que se trata de dinero. Para no correr el riesgo de perder bienes en los herederos de los miembros del clero, lo mejor que podían hacer era impedir que esos herederos llegaran a existir. Lo cual es muy egoísta, y aunque para algunos monjes que por elección eran célibes no fue un gran cambio, para otros causo mucha discordia. La iglesia católica anunció en el Concilio de Trento, celebrado en 1563, que quien lo rompiera sería expulsado del clero.
Creemos y sostenemos la idea de que realmente no se les debería prohibir a los miembros de la iglesia católica el matrimonio, o el enamorarse, pues es nuestra naturaleza como seres humanos.
Es muy triste esto, ademas que siendo honestos, no todos pueden con la abstinencia y la soledad. Y esto causa que se repriman y que haya violaciones, pedofilia, muchos homosexuales en los conventos, abortos clandestinos de monjas...
Ademas, no en todas las religiones se tiene que hacer el voto de castidad. En el judaísmo los rabinos pueden tener relaciones y casarse. La única recomendación es que la esposa sea judía.
En el cristianismo protestante los pastores (bautistas, metodistas, de la Asamblea de Dios, o de cualquier otra corriente) se pueden casar. Entre los luteranos, hay grupos de monjes que, por decisión propia, adoptan el celibato. En el cristianismo ortodoxo los hombres casados pueden ser sacerdotes, pero difícilmente serán promovidos a obispos. La regla es la misma en las corrientes católicas orientales, como la maronita.
Esperamos que en un futuro no tan lejano, la iglesia pueda permitir a los servidores de la iglesia (obispos, sacerdotes, monjas) poder contraer matrimonio con quien deseen y tener los hijos que quieran.
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